PEQUENA SELECCIÓN DE CONTOS INVENTADOS POLOS ALUMNOS.
DEBÍAN TER UNHA PERSOA PROTAGONISTA E UN ANIMAL ANTAGONISTA.
DEBÍAN TER UNHA PERSOA PROTAGONISTA E UN ANIMAL ANTAGONISTA.
(As imaxes foron baixadas de internet)
¡COME EN TU
CACHARRO!
En Jaén,
Roberto vive con un loro. Este señor tiene alrededor de sesenta
años. Como he dicho antes, vive con su loro, Andy. Todos los días
estos dos tienen una disputa. El animal no quiere que le echen la
comida en su cacharro. Prefiere tenerla repartida en su jaula. Pero
Roberto se la echa en la caja. Si el señor ve que Andy esparce la
comida en su jaula, no recibe la siguiente comida. Al loro no le
importa no comer. Roberto cada vez se desespera más. Al animal no le
preocupa el castigo que le impongan. Hasta que un día el señor tuvo
una idea: le pegaría la comida en su cacharro, sólo podría rozarla
con su pico. Esto solucionó su vida. Al desayunar le metía un
cacharro con la comida suelta. Si la esparcía le cambiaba la caja
por una con la comida pegada. Una semana después el loro comprendió
que si esparcía su comida no la podría comer después.
Antía
Érase
una vez una princesa con una larga melena rubia y muy guapa llamada
Alicia. Alicia ya había cumplido 16 años y a esa edad tenía que ir
a buscar las joyas de su difunta madre. Las joyas se encontraban en
las montañas, en un árbol rosa. El viaje duraría varios días, así
que preparó comida y bebida suficiente. También llevó una tienda
de campaña para dormir por las noches. Pero, un malvado conejo
llamado Pelusa se interpondría en su camino. Pelusa quería esas
joyas ya que eran muy valiosas.
La
princesa comenzó su viaje. El primer día el conejo metió
serpientes en la tienda de Campaña de la princesa, pero ella tocó
su flauta mágica y las hipnotizó. Luego las hechó de la tienda.
El
segundo día Pelusa se comió toda la comida de la princesa, pero
ella preparó un caldo de verduras con algunos vegetales y agua del
río y también pescó un pequeño pez.
Al
tercer día, le robó la bebida, pero ella bebió agua de un
manantial cercano.
Al
final el conejo llegó al árbol rosa antes que la princesa, pero
ella se convirtió en una preciosa hada y congeló al conejo con un
hechizo mágico.
La
princesa cogió las joyas de su madre y se fue volando a su castillo.
Eva
Había una
vez un niño llamado Luis. Un día en el colegio, la profesora les
mandó hacer una redacción sobre el animal más peligroso que
conocieran. A Luis lo primero que se le vino a la cabeza fue
investigar al gran águila que habita en el parque de la esquina. Lo
malo es que habían prohibido la entrada a ese parque porque el
águila era muy peligrosa.
Después,
todas las tardes iban a jugar con él. Desde ese momento, todos los
niños iban a jugar con ellas al parque y el ayuntamiento quitó la
señal de peligro para que toda la gente pudiera disfrutar de ese
fenómeno.
El águila
grande y madre de las crías aprendió a ser buena y amable.
Mario
CONQUISTA
DE LA SELVA
Hace
muchos años, en la selva Amazonas, había un equilibro para que
funcionara todo. El león era el rey, una persona justa, solidaria y
amable. Y junto a él siempre estaba Mohamed, un niño con el pelo
negro como el azabache y los ojos azules como el agua. A él lo
encontró el rey, cuando solo era un bebé. Desde entonces son los
mejores amigos. Con el tiempo fueron creciendo y cada día se volvían
más valientes y aventureros. Hasta que un día la felicidad del
reino cesó. Pues había aparecido un tigre que se hacía llamar El
Rey de la Selva. Un día secuestró al verdadero rey de la selva para
sacrificarlo. Mohamed no podía permitir que el tigre matara a su
amigo y gobernara la selva puesto que el era un ser despiadado. Así
que Mohamed se dirigió hacia la guarida del tigre. Estaba dentro de
un volcán que llevaba inactivo miles de años. Entró con mucho
cuidado, pues el tigre tenía guardias alrededor del volcán. Así
que distrajo a los guardias con flechas y entró. Vio a su amigo
atado y malherido en una esquina. Fue a ver si estaba bien y, de
repente, apareció el tigre detrás de él. Empezaron a luchar y
Mohamed hirió al tigre, lo dejó sin una pata; en ese momento el
tigre desapareció. Y no ha vuelto a aparecer, al menos que nosotros
sepamos. Al final era un cobarde.
Niccoll
EL LOBO
CORREDOR
Había una
vez un señor mayor que vivía en una cabaña muy vieja. El pobre
señor no tenía dinero y la ropa que llevaba puesta era de lana de
oveja. Todas las mañanas sacaba su rebaño a pastar. Pero un día
por la mañana vio que le faltaban ovejas, y entonces hizo guardia
por la noche. Eran las once de la noche, estaba todo oscuro y no se
podía ver nada. De repente oyó un ruido del bosque. Era como si se
fuera acercando cada vez más. El señor cogió su escopeta y fue a
mirar. Cuando se acercó, vio un enorme lobo gris de unos tres metros
de alto. El señor le pegó un tiro, pero nada. El lobo salió
corriendo y el hombre hacía lo que podía para alcanzarlo. El lobo
cojeaba, y se cayó al suelo; entonces el señor aprovechó y le pegó
tres escopetazos, y murió al fin. Desde ese día el señor se sintió
muy orgulloso de matar un lobo tan grande y de paso se hizo un abrigo
con su piel.
Samuel
EL
SECRETO DE LA COLINA
Un
día iba caminando un hombre pobre que no tenía ni una moneda, y por
eso vivía en un bosque. A la mañana siguiente, tropezó con una
roca y cayó de narices contra el suelo; de repente, dentro de un
árbol muy agujereado, había un viejo mapa. ¡Era el mítico mapa de
la colina escarpada! No se lo podía creer, ¡lo había encontrado!
Ese día fue caminando hasta la colina escarpada. Costaba mucho subir
porque el hielo resbalaba mucho. Cuando estaba a mitad de camino,
apareció un feroz e inmenso tigre, era muy grande. El tigre atacó
al pobre hombre, pero de repente el tigre se dio cuenta de que atacó
al hielo y provocó una avalancha. El pobre hombre se escondió
detrás de una gran roca para evitar la avalancha, y la evitó. Pero
el tigre no tuvo tanta suerte, se cayó a un lago que había al lado.
El hombre siguió su camino, ya le quedaba muy poco, pero unas
grandes rocas bloqueaban el camino El hombre no se rindió y apartó
cada roca de una en una. Cuando llegó hasta arriba, ya veía el
tesoro. Apareció el tigre y dijo:
-Para
conseguir el tesoro tendrás que vencerme.
El
tigre tiró al suelo al hombre, se puso encima de él y a punto de
matarlo. El hombre estiró las piernas y tiró al tigre hasta un gran
y hondo abismo negro.
Un
mes más tarde, el hombre se había convertido en un millonario y fue
muy feliz. Desde entonces ya pudo vivir en la ciudad.
Martín
LAS BELLOTAS DE LA AVARICIA
En
un bosque de Galicia, vivía un chico con una granja enorme. Tenía
cerdos, vacas, ovejas, gallinas... Este gran y fornido joven se
llamaba Mauro. Mauro ganaba, en las ferias, mucho dinero.
Él,
para dar de comer a los animales, tenía que ir al pueblo. Como cabía
la posibilidad de perderse, tenía un mapa.Una
vez, cuando salía a comprar alimento, una ágil y astuta ardilla le
robó el mapa. La siguió hasta llegar a su cueva. Pero esta se dio
cuenta. Escapó a toda aspirina. El joven Mauro la observó y vio una
pila de bellotas. El joven se fue a su casa dispuesto a idear un
plan.
Al
día siguiente, volvió a su guarida. Él pensó que sería tonta,
pues la cueva estaba descubierta. Pero no era así porque había una
trampa. Mauro la pisó y se cayó al suelo y se cayó a un profundo
agujero. Por suerte, tenía un pico y cavó en línea recta hasta
llegar al lugar donde guardaba todas y cada una de sus bellotas. Dio
un golpe con el pico y, al instante, todas cayeron. Mauro cogió una
bolsa y las recogió todas. Enseguida la ardilla se dió cuenta pero
el joven le propinó un golpe por el cual el animal se quedó
inconsciente.
Ya
de noche, llegó a su granja y le dió comida (las bellotas) a to dos
sus animales.
Luis
JORGE
CONTRA KIKE
Había una
vez un hombre de pelo rubio muy cobarde llamado Kike que tenía como
mejor amigo a un elefante llamado Jorge. Un día Kike fue a la tienda
de mascotas y encontró otro elefante super bonito. Kike se paró a
pensar si cambiaba de elefante o seguía con el que tenía. Se quedo
un rato pensando... y optó por cambiar de elefante. Jorge se enfadó
tanto que decidió deshacerse de Kike.
Al día
siguiente, Kike ya había abandonado a Jorge. Abrió la puerta, salió
de casa y apareció Jorge intentándolo aplastar. Kike entró de
nuevo corriendo intentando huir de él. De pronto comenzó a
cansarse, se cayó al suelo y dijo que ya no tenía escapatoria.
Entonces, en el último segundo, se cayó de un estante una pistola
“encogedora” que se disparó accidentalmente y minimizó a Jorge
al tamaño de una bacteria. Kike se sorprendió tanto que celebró
una fiesta.
David
Cortés
